El baile desde otra perspectiva
Nancy es Asistente de la clase de Baile Moderno
Por Nancy Pérez Araujo
Hablemos de lo inspirador que resultan las sonrisas que nos brindan cada niño y niña al reír y disfrutar el bailar como si esa fuese su única escapatoria de todo lo que pasa en el mundo como si solo ese pequeño momento importara buscando exprimir hasta la última gota de sudor para ser feliz. Capturar el momento preciso donde hasta un mal paso en la coreografía no tiene el peso suficiente para dejar de reír a carcajadas, sino, aún mejor, tiene el poder de motivarte a ser mejor e intentarlo hasta que salga lo mejor posible. Es impresionante ver que ni las barreras de la edad puedan con la intensidad de las ganas de bailar, de disfrutar una buena melodía y dejar que se apodere de todo tu cuerpo y se mueva hasta llenarte de energía. Es encantador como hasta el pequeño más tímido hace el esfuerzo por dar lo mejor de sí y sacar sus mejores movimientos logrando salir de su zona de confort, aunque sea solo por el tiempo que dura una canción. En la clase de baile vemos también a la pequeña que tiene ese encanto para ayudar a los demás a seguir con los pasos de la canción con su mejor interpretación y su agilidad con los pies y la cabeza, acoplarse a los pasos de cada canción con destreza. Y no olvidemos a los que su liderazgo brota cuando llega el momento de guiar a los demás haciendo lo necesario para no dejarlos atrás. Eso es lo que ven mis ojos al instante que se inicia la clase.
Muchas historias, cientos de caminos que se van formando y puliendo. En mi experiencia con BYTE puedo decir que no solo es darles un momento para bailar, o una coreografía que seguir: es darles un espacio para ser ellos y ellas mismas para divertirse, explorar, adquirir nuevas destrezas y habilidades para romper las zonas de confort y dejarse llevar por cada sonido y olvidarte del mundo exterior y solo ser tú en ese pequeño momento. Que maravilloso que BYTE me permita lograr todo eso, llevarles momentos de felicidad y nuevas experiencias a cada niño y niña. Lo que más disfruto de esta experiencia es la inspiración que me brindan para seguir mejorando, reflexionar cada día sobre la vida, amarla y disfrutarla tanto como se pueda, y al igual que el baile, dejarse llevar y solo disfrutar del momento.