El aprendizaje social y el trabajo de BYTE
A propósito de la celebración del día internacional del profesional de la psicología (el pasado 20 de mayo), quisiera resaltar la gran contribución del psicólogo Albert Bandura, quien a través de su investigación nos proporcionó la Teoría del Aprendizaje Social, la cual nos explica el comportamiento como una forma de aprendizaje a través de la socialización, pensamiento y el tener a otras personas como parte del moldeamiento.
Es recomendable repasar cómo a través de su experimento del Muñeco Bobo (video anexo), nos explica lo fácil que es el aprendizaje del ser humano a través del ejemplo de los y las demás. Desde siempre se ha considerada válida la premisa de que observando se aprende, pero Bandura ejemplificó que las conductas son producto de modelos a nuestro alrededor.
Durante la experiencia que hemos tenido en BYTE al convivir con niñas y niños, así como con adolescentes y jóvenes, en una gran variedad de sedes, he reflexionado sobre las diferencias que podemos encontrar en las formas de interactuar: niñas y niños, de cualquier edad, llevan, en su comportamiento, un reflejo de lo que han aprendido socialmente en sus entornos de origen. Además de resultar interesante y destacar la labor social que podemos hacer, es importante no juzgar los orígenes de ciertos comportamientos, procurando una convivencia donde el juicio y prejuicio no ocasionen problemas promoviendo un entorno seguro de aprendizaje.
Es verdad que tanto niñas como niños llegan a nuestras clases con comportamientos moldeados por su entorno, pero hay que destacar que el aprendizaje es un proceso continuo en el que socializar con nuestro staff y más niñas y niños, además de los conocimientos y habilidades que podemos transmitirles, pueden determinar la forma en la que se desenvuelven en su presente y futuro.
No es solamente lo que han aprendido en su entorno de origen, ahora es nuestro espacio de trabajo la oportunidad de encontrarse con otras formas de interactuar y aprender.